Sonajero

Sonajero

         

Es el artilugio más interesante que hemos encontrado para confeccionar quinielas.
No es publicitario, sino que se vendió como un juguete, en las tienas.  Quedó obsoleto al ampliarse el número de partidos de la quiniela a 15, ya que sólo cuenta con 14 signos.

Asemeja una especie de sonajero, con un extremo abultado que contiene 14 dados, pequeños, de seis caras, y un cuerpo alargado, delgado, a modo de contenedor transparente. Al poner la parte delgada hacia abajo los dados van cayendo al interior, dispuestos uno tra otro, mostrando una de las seis caras.

Cada dado tiene 6 caras con, 3 signos 1, 2 signos X, y 1 signo 2. Por lo tanto cualquier combinación de signos es posible, desde 14 signos 1, hasta 14 signos 2, pasando por todos los valores intermedios posibles.

Como resultado más probable, la combinación que nos ofrezca este dispositivo tendrá el 50% de signos 1,  el 33,3% de signos X, y el 16,6% de signos 2, pero este es el valor estadístico medio, que no tiene nada que ver con el resultado que nos ofrezca en cada utilización.

Aunque tiene el inconveniente de que sólo ofrece signos para 14 partidos, como forma de generar aleatoriamente una apuesta, es el mejor de todos los dispositivos encontrados. No podríamos decir lo mismo si se tratara de extraer cada semana muchas apuestas, ya que en este caso el conjunto de todas ellas ofrecería unos valores medios que se acercarían a la media descrita que, como hemos visto en otros dispositivos, no se corresponde con los porcentajes reales que se dieron para los tres signos, en los partidos de la temporada anterior. 

De todos modos la proporción entre 1, X, y 2 es muy diferente a la que se da en los resultados reales. Es obvio que para ser una herramienta útil los dados deberían tener 10 caras, 5 con 1, 2 con X, y 3 con 2.